Corrida en las tetas de una chica mexicana

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Si paró a esta preciosidad a la que se le había estropeado el coche en la carretera no fue solo por amabilidad, sino porque la chica estaba muy buena. Se ofreció a llevarla a casa mientras la grúa venía por el vehículo averiado; y lo hizo pensando que de allí la linda mexicana no salía sin follar. No tenía que preocuparse, sin embargo, porque la zorrita, además de agradecida, era muy viciosa, y sabía que con un polvo le iba a dar las gracias de sobra. Aunque él se dio el lujazo de correrse en las tetas de la jovencita, eso parece que era un plus por ser un buen samaritano.