El ladrón se convierte en un porno voyeur

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Pensando que no había nadie en la casa, este ladrón se metió en un chalet adosado para ver qué podía pillar. Casi le da un infarto cuando escucha un ruido, y con mucho cuidado va a ver qué puede ser. Al entreabrir la puerta del dormitorio, casi se cae de culo al ver a una madura desnuda. Y no solo eso, la rubia tetona es una auténtica belleza, y su polla empalmada parece pensar lo mismo. Ya no piensa en llevarse nada, sino en conseguir tener sexo con esa tia buena, que da un respingo cuando se da cuenta de su presencia. Sin embargo, en vez de asustarse, parece que le nota la cara de cachondo; así que le hace una comida de polla, sabiendo que no tardará en follársela.