Zorreando en el gimnasio hasta que se la follan

401

A pesar de que es una tia buena a la que poca falta la hace entrenar en el gimnasio, hace tiempo que esta rubia veinteañera anda detrás de uno de los monitores. Lo conoció acompañando a su madre, y desde entonces no piensa en otra cosa que en su polla gorda penetrando su coño caliente. Incluso se apuntó a sus clases, y llegados a este punto, ha puesto en marcha un programa de acoso y derribo, incluso en los vestuarios, donde lo persigue sin cesar. Y hoy por fin sus esfuerzos han dado sus frutos: el tipo no pudo resistirse más a esta tetona cachonda que casi rogaba por una follada.