Orgía de sexo en un garito nocturno

426

Una reunión de amigotes se volvió otra cosa cuando uno de ellos, dueño de un garito, propuso contratar a un par de putas para que animaran el cotarro. Pero estaba claro que querían que hicieran algo más que animar, no tardaron ni dos minutos en empezar a meterle mano a las rameras, y en tener a las mujeres desnudas. Entonces empezaron a compartírselas entre unos y otros, follándolas unos en cuanto acababan los otros. Aquello se convirtió en una orgía en toda regla, aunque la mayoría de estos cerdos están casados y se han convertido en marido infieles.